La energía solar no solo es una solución ecológica, sino también una excelente forma de reducir costes energéticos a largo plazo.
Pero cuando se trata de instalar paneles solares en una comunidad de vecinos, la cosa se complica: hay que convencer a los propietarios, tomar decisiones conjuntas y asegurarse de que todos salgan beneficiados.
Todo eso puede ser misión imposible cuando no se tiene la suficiente información y hay propietarios no del todo convencidos.
Lo mejor es conocer con certeza los beneficios para que todos estén de acuerdo desde el minuto uno.
4 beneficios de instalar paneles solares en una comunidad de vecinos
Esta decisión tan ecológica trae consigo muchas ventajas tanto económicas como medioambientales.
Aunque la inversión inicial pueda parecer un obstáculo, los beneficios a largo plazo hacen que valga la pena.
01.-Ahorro en la factura de la luz
Uno de los motivos principales para optar por paneles solares es la reducción en la factura eléctrica.
La energía generada puede usarse para el consumo común (ascensor, garaje, pasillos, etc.), lo que se traduce en un menor gasto mensual, luego ya, dependiendo de la instalación y la cantidad de sol de tu situación geográfica, el ahorro puede alcanzar hasta un 70% en el gasto de electricidad de las zonas comunes.
Además, si la comunidad opta por el autoconsumo compartido, cada vecino podría beneficiarse directamente, reduciendo también su factura individual.
02.-Revalorización de las viviendas
Las viviendas con energía renovable tienen un mayor atractivo en el mercado inmobiliario.
Un edificio eficiente energéticamente llega a aumentar su valor entre un 5 y un 10%, además, contar con una certificación energética mejorada, en la actualidad, es un factor clave en la decisión de compra o alquiler.
03.-Reducción del impacto ambiental
El cambio climático es una preocupación global, y cada pequeña acción cuenta.
Cuando generas energía limpia y renovable, disminuyes la huella de carbono del edificio, contribuyendo a la lucha contra el cambio climático, si una sola persona aporta, imagina una comunidad de vecinos.
Se calcula que una instalación solar media en un edificio puede evitar la emisión de varias toneladas de CO₂ al año.
Posibilidad de subvenciones y ayudas
Existen ayudas estatales y autonómicas que pueden reducir considerablemente la inversión inicial, no solo eso, sino que además, muchas comunidades pueden beneficiarse de bonificaciones en impuestos como el IBI o deducciones fiscales.
Se trata de investigar y aprovechar estas ayudas en tu localidad para que la instalación sea mucho más asequible.
Posibles inconvenientes y cómo superarlos
A pesar de sus muchas ventajas, también presenta algunos retos que hay que conocer para que todos los vecinos sean conscientes y puedan decidir con toda la información sobre la mesa.
Desde la inversión inicial hasta los problemas de consenso entre todos (que a veces es lo más complicado de solucionar), hay que tener en cuenta cada aspecto antes de tomar una decisión.
Coste inicial de la instalación
Y lo hemos comentado, y es el que suele echar para atrás enseguida.
Puede variar dependiendo del tamaño de la instalación, sin embargo, las subvenciones y la financiación a plazos pueden hacer que sea una inversión asumible en muchas ocasiones si se presenta como un beneficio a la larga.
Piensa que, por lo general, el ahorro generado permite amortizar la inversión en menos de 10 años.
Consenso entre los vecinos
Lograr que todos los propietarios estén de acuerdo es (muy muy) complicado.
Algunos pueden dudar de la rentabilidad, mientras que otros no quieren invertir, sin más, y es fundamental presentar datos claros sobre el ahorro y los beneficios, junto con opciones de participación flexible para quienes no deseen invertir directamente.
Aspectos legales y permisos
Dependiendo de tu comunidad autónoma, igual debes solicitar permisos municipales o adaptar la instalación a normativas específicas, para eso tener cerca una empresa especializada simplifica mucho el proceso, y ayuda a evitar problemas legales en el futuro.
Cómo convencer a los vecinos y lograr el acuerdo
Para que la instalación llegue a buen puerto, es fundamental que todos los propietarios estén informados y de acuerdo con la inversión.
¿Cómo hacerlo?, bueno, te dejamos estrategias que funcionan para conseguirlo.
1. Informa con datos concretos
Prepara una presentación con datos reales sobre el ahorro, el tiempo de amortización y las ayudas disponibles.
Si es posible, muestra ejemplos de otras comunidades que ya han dado el paso y los beneficios que han obtenido.
2. Consulta con un profesional
Antes de llevar el tema a la junta de vecinos, contacta con una empresa especializada que pueda asesorarte sobre costes, viabilidad y subvenciones, con todo eso das mucha más credibilidad a la propuesta.
3. Explicar las distintas opciones de reparto de costes
Hay varias formas de distribuir el coste y el beneficio de la energía solar en una comunidad, y es importante elegir el modelo que mejor se adapte a las necesidades de los vecinos para que todos se sientan cómodos con la inversión.
4. Busca subvenciones y bonificaciones
Investiga las ayudas disponibles para reducir el coste, cuentas con bonificaciones del IBI o del ICO que pueden hacer que la inversión inicial sea mucho más llevadera y ayudar a convencer a los vecinos indecisos.
5. Vota en la junta de propietarios
Según la Ley de Propiedad Horizontal, para aprobar la instalación de paneles solares en zonas comunes, es necesario el voto favorable de al menos 1/3 de los propietarios.
Por otro lado, si el uso es individual, basta con informar a la comunidad.
Instalar paneles solares en una comunidad de vecinos es una decisión inteligente y beneficiosa, pero sabemos que puede complicarse si no están las cosas claras o si no todo el mundo lo ve.
Lo que es seguro es que contar, antes de dar el paso incluso, con el asesoramiento de profesionales te ayuda mucho a conseguirlo.